APRENDER EN COMUNIDAD


aprender en comunidad


A lo largo de toda mi vida, he tenido muchas experiencias como alumna. He realizado una carrera universitaria, un máster, cursos presenciales intensivos y online, cursos a distancia, retiros de teatro, clases de yoga, talleres de radio…Y hay una cosa que no puedo pasar por alto. Lo que más me ha transformado de todas las formaciones que he recibido, es el poder aprender en comunidad.

Quiero centrarme en concreto en los cursos online. Porque cuando estudias individualmente, puedes pensar que estarás solo durante tu estudio. Pero lo bueno de aprender dentro de una comunidad es que nunca te sientes solo.

Voy a hablaros de mi experiencia en dos cursos que he realizado.

El primero de ellos, de Escritura creativa. Durante el curso, cada alumno tenía que escribir un relato y a medida que avanzaba el temario, ese relato iba transformándose en otros relatos diferentes según el enfoque que nos proponían los profesores. Lo normal en un curso es ir pasando los distintos ejercicios a los tutores, y éstos los van corrigiendo e indicándonos lo que está mal. Pues además de esto, lo diferente que este curso me ofreció era el hecho de poder enviar mis relatos y mis ejercicios a los demás compañeros y recibir también sus valoraciones. Al mismo tiempo que yo también podía leer los ejercicios de los demás y ofrecer mi punto de vista.

Normalmente antes de tener el blog, yo siempre había escrito para mí misma. No estaba acostumbrada a que desconocidos leyeran relatos que para mí eran muy íntimos. Y fue algo revelador, me di cuenta de que mi forma de escribir podía enganchar a mucha gente y a otros no, claro está. Pero tanto las valoraciones positivas como negativas me aportaban un contacto con la realidad que antes no tenía, y todo me sirvió de aprendizaje personal. Y me sirvió para darme cuenta de que en realidad un escritor necesita ser leído por los demás. Aunque no siempre sea bien valorado.

El segundo curso, de Redacción digital. Aquí la palabra COMUNIDAD, debo escribirla con mayúsculas porque desde el minuto uno entramos en contacto a través de los distintos tutores con los demás compañeros. Se formaron grupos de unos veinte alumnos y cada semana se realizaban tutorías con el tutor asignado por zoom. Está claro que las tecnologías hacen que todo sea mucho más cercano y además de poder comunicarnos por mail  permiten que podamos vernos las caras y hablar entre nosotros.

Así desde el principio el contacto es más estrecho y podemos sentirnos cómodos trabajando juntos. No sólo había videoconferencias entre los distintos grupos, sino también reuniones mensuales con los directores de la Escuela. En ellas, nos veíamos todos los alumnos de la edición y poníamos en común logros y preocupaciones sobre los módulos más complejos. Es enriquecedor compartir un objetivo común, que en este caso era poder vivir de la escritura. Se estrecharon lazos de forma profesional y personal, porque todos nos sentíamos identificados entre nosotros. Lo mejor de esta formación ha sido que la comunidad seguirá después de haber finalizado el curso. Al igual que el  apoyo entre todos y el intercambio infinito de conocimientos.

Resumiendo, he podido sentirme más segura de mí misma y con un feed back continuo. Y en ningún momento me he sentido sola. Y lo mejor es que aunque carecía de unos conocimientos he podido ayudar a otros. Porque cada uno ha pasado por unas vivencias distintas, y eso hace que el aprendizaje grupal sea mucho más completo.

Aprender en comunidad es una experiencia que recomiendo a todo el mundo, puesto que sales reforzado en todos los sentidos.

Personalmente, ha sido un descubrimiento completamente transformador.

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

LA NARIZ ROJA