CUENTACUENTOS PARA ADULTOS

 Existen muchos motivos por los que deberíamos descubrir los cuentacuentos para adultos. A lo largo de nuestra infancia los cuentos han formado parte de nuestra vida, de nuestra rutina diaria. Desde pequeños nuestros padres nos leían cuentos en la cama para dormirnos. Cuentos clásicos que se han quedado grabados para siempre en la memoria.

Pero los cuentos no siempre tienen que tener como lectores o espectadores a los niños o a los más jóvenes, sino que los adultos también debemos aprender a disfrutar de la magia de los cuentos.

Los cuentacuentos se han reinventado. Además del formato papel que siempre estará presente y donde podemos encontrar cuentos interesantes, se han creado cuentacuentos para adultos en distintos formatos. Para poder disfrutarlos de otra manera.

Existen espectáculos donde se pueden escuchar estos relatos. Bibliotecas,cafeterías y pequeños teatros. Ofrecen un pequeño escenario para aquellas personas que se animan a contar un cuento para mayores, micrófono en mano. 

Hay cursos especializados para aprender a contar cuentos, porque no es tan sencillo como parece. Hay que dirigirse a un público, crear expectación, mantener la intriga hasta que todos quieran conocer el final. 

Podemos acceder también a los cuentos en formato audiolibro, como una  especie de podcast donde se relatan historias y cuentos para adultos. Algo parecido a las antiguas radionovelas o programas de radio. 

En esos programas,el locutor o locutora compartía con los oyentes los relatos que escritores desconocidos enviaban al estudio.

Hace poco leí un libro llamado El satanismo contado a los niños, no es más que una recopilación de cuentos para adultos, con una prosa poética y unas  historias llenas de imaginación y de lírica. Os lo recomiendo si queréis leer algo diferente y veros inmersos en la magia de los cuentos. Su autor, Lorenzo Luengo.

Aunque tampoco podemos olvidar algunos cuentos de siempre, que aunque  nos los han contado siendo pequeños, no hemos llegado a entender su moraleja hasta siendo más mayores. Por poner ejemplos, resalto dos de mis cuentos favoritos: Alicia en país de las maravillas y El Mago de Oz. 

La complejidad y profundidad del significado de estos cuentos es difícil asimilarla siendo niños, pero si los vuelves a leer siendo mayor, es como redescubrir un  mundo nuevo lleno de valores.

Por todos estos motivos, te recomiendo que no dejes aparcados los cuentacuentos para adultos, ni los subestimes, porque siempre hay una historia interesante a la vuelta de la esquina, para que te cuenten o para contarla tú mismo a los demás.