CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO

 

Cuando en el colegio te mandaban hacer una redacción sobre algo, no te daban las pautas necesarias para hacerla. Escribías sin orden e improvisando todo lo que se te venía a la cabeza. No seguías unos pasos concretos ni te orientaban sobre cómo escribir un texto.

Pero no se puede escribir sobre la marcha, porque todo texto tiene que tener un sentido, una estructura y un hilo conductor.  Así que volvamos al principio, ¿cómo escribir un texto?

Lo primero que debes tener en cuenta es la idea principal sobre la que vas a escribir. Y tanto esa idea y como el título del texto deben incluir la palabra clave. La idea principal, debe ir acompañada de otras ideas claves para desarrollar más en profundidad el mensaje. Por ejemplo, una idea sobre la que hablar puede ser la maternidad. Las ideas claves secundarias podrían ser: maternidad en la adolescencia, enfermedades durante el embarazo, cambios hormonales y la interrupción del embarazo. Con todas estas ideas, puedes elaborar y desarrollar tu mensaje, dándole tu enfoque personal.

Recuerda que la inspiración puede aparecer en cualquier momento, y hay que estar preparado para atraparla. Ten a mano siempre tu móvil o una libreta para anotar y crear un listado con ideas para futuros textos, porque nunca sobran.

Después de tener clara la idea, debes contextualizarla o argumentarla.

*Habla del origen de la misma, cómo surgió, si fue a raíz de un sueño, de un recuerdo o experiencia real, etc.

*Piensa un posible título atractivo y que llame la atención del lector.

*Si  la idea surgió a través de un contenido digital, se puede incluir un enlace al artículo que te inspiró.

*Incluye una historia personal relacionada con el tema que quieres exponer (storytelling).

*Busca una imagen que acompañe al texto, acorde con su contenido.

Ya vas teniendo unas pautas y un orden para saber cómo escribir un texto. Ahora solo te queda ponerlo todo en práctica. Acostúmbrate a tomarte unos minutos antes de escribir para pensar lo que quieres transmitir, planifica, haz esquemas de las ideas principales y ordénalas de mayor a menor importancia. Y ya casi lo tendrás hecho.

No olvides que al igual que el título, el párrafo introductorio debe captar la atención del lector. Describe una experiencia empezando contando una historia, causa expectación, lanza una pregunta…hay muchas fórmulas para captar esa atención que haga que se desee leer todo el texto completo. Y por último, debes hacer una llamada a la acción, para interactuar con los lectores, para ver si realmente están al otro lado y si han entendido el contexto de lo que explicas con tus palabras. Invita al lector a reflexionar sobre lo que ha leído.

Si sigues todos estos pasos, aprenderás cómo escribir un texto sin tanto esfuerzo, investigando en profundidad sobre el tema que quieras y exponiendo de forma clara todas tus ideas.

¡Empieza ya a practicarlo!