EL ESPECTÁCULO DEBE CONTINUAR

Érase una vez una actriz frustrada.

Érase una vez una actriz que decidió dar un paso más allá y ser valiente para variar. Porque el espectáculo debe continuar, aunque solo haya una persona observando desde la butaca.

La actriz que llamaremos Actriz 1, se puso a reflexionar sobre sus sueños. Necesitaba una motivación. Ella sentía algo que nunca se pudo quitar del corazón ni del alma, aunque sus propias voces interiores luchaban por acallarlo. Actriz 1 salió a pasear una mañana de verano, antes de ir al trabajo. Después de un largo paseo, se sentó en el banco de un parque y respiró hondo. Llenando sus pulmones de paz, de recuerdos y nostalgia. Cerró los ojos y dejó que el canto de los pájaros acariciara sus oídos y fueran guiando sus pensamientos. Su mente se puso en blanco durante un instante y empezaron a aparecer imágenes que para ella fueron muy reveladoras…

La primera vez que pisó un escenario en un recital de poesía. Los primeros aplausos que sin duda causarían adicción.

El primer curso de teatro amateur. Los primeros juegos entre compañeros, el gusanillo observándola sigiloso entre bambalinas para instalarse en su piel.

El hada nube gritando a los cuatro vientos "Tararí que te ví" avisando a los niños de la llegada de la bruja Tormenta y el mago Relámpago... La carita de aquellos niños ilusionados con la magia del vestuario, la escenografía y los efectos de sonido. Muchos visitaban el teatro por primera vez y muchos no recordarían aquella función de mayores.

Juana de Arco en la hoguera. Su primer monólogo desgarrador mientras las llamas la iban quemando en la hoguera ante la mirada atónita del público.

Aquella coreografía del musical de Chicago, que durante unos minutos la transportó a otra realidad.

Su primer espectáculo de improvisación, dirigido por su primer Profesor especial. De esos que enseñan valores y respetan las opiniones de los alumnos, de los que hacen crecer personal y profesionalmente. Representaba a Felicia, una joven siniestra con un pasado muy oscuro. La acompañaban Actriz 2 y Actor 1.

Más funciones de improvisación y microteatro. El público tan cerca, escuchando sus respiraciones y sintiendo los ojos clavados en cada parte de su cuerpo, analizando sus reacciones, su agilidad mental…Fue una experiencia tan diferente e íntima…

Otros proyectos. Clown en un hospital, para los niños de oncología. La experiencia más bonita y más dura como actriz. Nunca podrá olvidar la mirada de aquel niño en brazos de su padre, la tristeza instalada en él, la inocencia borrada por la enfermedad. Y el enorme esfuerzo por intentar arrancarle una pequeña sonrisa.

Over the rainbow, una obra escrita y dirigida por Profesor y donde Actriz 2 también era su compañera. Donde sus miedos de la infancia cobraban vida en sus personajes.

Siguiendo un camino distinto, siguieron otras escuelas y otras funciones. Más gente nueva.  Invictus. En esta función cambió de compañera…en esta obra ella encarnaba a una persona que estaba a punto de morir…Qué difícil le resultó y qué cercana estuvo luego la muerte en su vida más adelante.

Todas estas imágenes se agolpaban en ella, sin dejarla apenas pensar. Y de pronto entendió algo, tenía que contar su historia, debía plasmar su alma en una obra de teatro.  Su trayectoria, su pasión, su frustración por no alcanzar las metas que le hubiera gustando alcanzar como actriz… Y entonces pensó en ellos, se le encendió la bombilla.

Casi por impulso, Actriz 1  llamó a Actriz 2 y  quedaron para  hablar sobre el proyecto que le rondaba por la cabeza. Dos payasas, su historia como actrices, sus miedos, sus futuras metas, sus sueños, sus caminos separados pero siempre unidos por la misma pasión…Podían empezar a escribir el guión entre las dos, aunque necesitarían un hilo conductor, alguien que las dirigiera, que las guiara y creyera en su proyecto. Era el momento de dejar de ser alumnas y convertirse en creadoras. Tenían la experiencia y el bagaje suficiente para hacerlo. Se miraron y las dos pensaron en Profesor. Él las conocía, casi las había formado como actrices, podía darles la libertad y la visión global que les faltaba.

Y así empezó todo. Actriz 1, Actriz 2 y Profesor, encontraron huecos en sus vidas para escribir el guión de su historia. Entre los tres y después de numerosas revisiones, llegaron a un guión definitivo y encontraron un lugar para ensayar. Empezaron los ensayos y al poco tiempo empezó una pesadilla llamada pandemia. Todo tuvo que quedarse aparcado.

Y ahí sigue de momento. Esperando que los astros vuelvan a alinearse para que esta historia se pueda contar sobre un escenario y Actriz 1 pueda por fin sentirse realizada y motivar a otras personas con su arte.

Porque pase lo que pase, el espectáculo debe continuar. Siempre.

 

(Continuará…)